miércoles, 15 de noviembre de 2006

Problemas gastricos

Los señores de la luz tambien enfermamos. Y siguiendo la inmutable e inalterable ley de Murphy, el mejor día para ponerse malito es el peor día para ponerse malito. Porque podría haberme puesto malito la semana pasada o la que viene que no tengo nada que rascar, pero no, es mejor esta semana que estoy hasta arriba de trabajo y ademas el viernes vamos a ver a Fito y los Fitipaldis a Vigo.
Despues de pasar un fin de semana de tres dias estupendo, porque el lunes es festivo local en mi localidad, el martes 14 de madrugada me dió un yuyu en la parte estomacal de mi sistema luminoso. Y aunque todo el mundo alega que puede ser culpa del fin de semana puedo decir en mi defensa que no me excedí ni en el beber ni en el comer.
A eso de la 1:00 a.m. del martes me desperté con unas horrorosas ganas de vomitar por lo que me hice los 15 metros - pasillo obstaculos - a oscuras en algo menos de 3 segundos dos decimas y eso porque se me atravesó una puerta en medio, para visitar al señor inodoro con el cual mantuve una educada conversacion que prefiero no reproducir porque podría herir sensibilidades.
Como la conversación era tan interesante decidimos repetirla de mutuo acuerdo el Sr inodoro y yo mismo cada medía hora o cada tres cuartos de hora. Tras una noche tan interesante (de hecho creo que tardaré algun tiempo en olvidarla), a la mañana me levanté con unas ganas locas de ir al trabajo.
El viaje en bus fué de lo mas divertido porque todo el rato me repetía mentalmente "no te queda nada en el estomago, no te queda nada en el estomago". Si, que ya se que es algo escatólogico y a mi tampoco me hace ninguna gracia, pero no es nada divertido ir en un autobus, mareado y concentrado en no vomitarle a ninguna persona por encima.
Una vez logrado el objetivo de no vomitarle a ningun pasajero del autobus, fuí raudo y veloz a tomar un cafelillo mañanero a donde la chica de ojos color miel, claro que una vez allí (y despues de la puñalada trapera de rigor) me dí cuenta que estando mal no me podía tomar un café. Me pedí una manzanilla con hielo que es mas digestiva.
Ya en el trabajo hice una revision velocidad de vertigo de todas las cosas susceptibles de pasarse de plazo y por ello meterme en problemas. Arreglados los flecos sueltos hablé con el jefe y me fuí para casita donde me encerré en mi cama toda la mañana (es placentero levantarse a primera hora, ir al trabajo para luego volver a casa a la cama, jeje). Y así me pasé el día a base de estar en cama en trance, beberme mi suero rico, rico (nota mental inventar el suero con sabor chorizo de cantimpalo, espetec, tarta de chocolate, que me forro). A la noche y ya algo mas recuperado me dispuse a ver House, no sin antes rezar que no hicieran mencion a ningun tema gastroduodenal.
Por fin, tras una noche sin visitas al excusado vuelvo a estar algo mejor y ya estamos a miercoles. Por desgracia para las personas que me rodean no he comido nada en un día y pico, si no se andan con cuidado muerdo. Ya casi le doy un mordisco a la de ojitos color miel pero me contuve. Me queda algo mas de media hora para largarme de la oficina y he pedido la tarde libre otra vez. Me voy a tirar toda la tarde en cama, jeje. Me noto hambriento. De hecho una señora que estaba tomando un pincho con el café se apartó de mi al ver como babeaba y me rugía el estomago mirando su pincho. Ademas ahora tengo alucinaciones con pasteles y bollería fina.
Hala, pasarlo bien.

1 comentario:

Toxcatl dijo...

Xtebra, y no solo tienes problemas gástricos, siento decirte: tambien te veo pelin desdibujado blogueramente hablando (vaya que nose carga bien tu pagina, ni tu avatar) dicho queda.-
Y que te mejores de lo de tu estomago (tiene pinta de ser una diferencia de opinion entre tu estomado y lo ingerido del tipo "¿me vas a digerir tu??? Posvaaserqueno, y ahora me vomito")